Dylan el Nobel

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Es muy difícil entender o si quiera pensar la simple idea de que un músico, aunque sea un músico del tamaño de Bob Dylan, al que este simple historiador considera un Dios de la música, sea el ganador del premio nobel de literatura.

Pero si lo pensamos con tantita profundidad, no es tan descabellada la idea, e intentaré explicarlo.

Lejos de reconocer que sé que las letras de Bob Dylan son literatura pura y del más alto nivel, lejos de sentirme un poco triste por que un escritor del tamaño de Philliph Roth tuvo la mala suerte de competir contra Dios, lejos de asumir que la poesía escrita por Dylan es arte en su máxima expresión , pero no cualquier arte, un arte con la virtud de devolver a la gente la poesía, esa poesía que en épocas modernas está elevada a una elite arrogante. Y la devuelve con todo el poder de la música, ese poder que puede llevar lo más mundano a un nivel de belleza inigualable, esto en el sentido aristotélico de “poesía”, que es aquello que encontramos como bello.

¿Aún cuesta entender por qué se lo dan? Por que Dylan tiene la capacidad de dominar todos los estilos musicales populares estadounidenses y desde su dominio hace sus más grandes aportaciones. No por nada “Like a Rolling Stone” es considerada la mejor canción de la historia de la humanidad, no por nada “Blonde on Blonde” es considerado el mejor disco de la historia, no por nada en el 2001 “Love and Theft” revoluciono la música inventando un nuevo estilo de hacer canciones que simplemente no existía.

Para un artista que sabe del poder de la palabra, que sabe del poder de la música y que sabe combinarlas para llevar la letra de una canción a niveles de literatura, lo menos que le podemos dar es un premio nobel, por que además de hacer arte, aporta algo a la vida normal de una persona normal, llegando a conclusiones que por momentos, pueden dejarte frío.

Por ello y mil razones más “Orfeo” ha ganado el nobel de literatura y sus fans como buenas “Euridices” no nos queda más que admirarlo y aplaudirlo. Y si aún lo dudan solo escuchen “Knocking on heavens doors”, ahí está mi sustento.

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