Abasolo, Guanajuato.- Ladislao González Marmolejo mejor conocido como el profe “Lao”, es un maestro ya jubilado desde hace 13 años, que presto su servicio a la docencia por más de 30 años en tierras abasolesenses.
El profe “Lao”, puntualizó que ser maestro fue la carrera ideal, ya que agradece a Dios a ver sido parte del crecimiento de los alumnos que pasaron por sus aulas.
“Recuerdo mucho a un alumno hijo de unos ladrilleros y llegaba a la escuela y no hablaba y yo pensaba que era mudo y solo me hacía señas ejemplificando una cruz y entendí que se llamaba así al paso del tiempo descubrí que no tenía ningún problema solo era tímido y no hablaba por eso le ayudé a expresarse y eso me llena el corazón, siempre recuero a crucito con mucho cariño”, relató.
Por otro lado, el maestro externó que entre todo lo bonito también ha pasado sustos, como en una ocasión que un alumno casi perdía un ojo.
“Me acuerdo que una vez un alumno me dio el susto de la vida cuando en el recreo se encajó un lápiz en el ojo por andar jugando, lo lleve hasta una clínica de Irapuato pensando mil cosas, gracias a Dios no pasó a mayores para jamás olvidare eso”, explicó.
El profesor culminó agradeciendo a todos los alumnos que pasaron por sus aulas en su tiempo de servicio como docente, a muchos los recuerda y siempre los llevara en su corazón.
“Tengo muchos alumnos que son doctores, ingenieros, licenciados y hasta maestros y me llenan de orgullo, hace poquito vi a una niña que le di clases, se llama Agapita Luna y la vi a como secretaria en la presidencia de Irapuato y me grito, -Profe se acuerda de mi- y sentí bien bonito verla realizada como licenciada y asi como ella he visto infinidad de alumnos que me llenan de orgullo”, concluyó.