
Abasolo, Guanajuato.- “Señorita Macrina” es así como era conocida la maestra que durante muchos años fuera directora de la escuela “Cuna de Hidalgo” ubicada en el centro histórico del municipio de Abasolo.
Aquellos que la conocieron refirieron que la maestra Macrina no quería dejar de ejercer su profesión de educar a los niños abasolenses, solo un accidente, una caída pudo hacer que la maestra dejara de asistir a su querida escuela, caída que a la postre acarrearía la muerte de la directora.
Una vecina que conoció y convivió con la maestra Macrina señaló que la casa que se encuentra en ruinas, sobre la calle 16 de Septiembre, número 105, era una casa hermosa, que la maestra tenía arreglada con muy buen gusto, en la sala donde convivían pasando horas platicando sobre los acontecimientos del pueblo y tomando café, estaba arreglada con muchos adornos.
Una cosa muy peculiar que había en la casa de Macrina es que estaba llena de plantas y antigüedades, pero en otra sección de la casa se encontraban todos los obsequios que los niños cariñosamente regalaban a la maestra.
“Macrina no tiró ningún regalo que los niños le obsequiaron durante toda su carrera como maestra, así como se los daban, así los guardaba, es más ni los abría”, señaló la vecina.
Otra de las personas que conocieron a la directora, señaló que la maestra era muy rica, que en su casa tenía botes llenos de dinero, dinero de aquellos tiempos, que si valía, como era soltera no tenía necesidad de gastar demasiado, así que todo su sueldo lo guardaba señaló la vecina de la maestra.
Una mamá que tuvo a sus hijos en la escuela Cuna de Hidalgo, mencionó que era buena maestra, pero castigaba a los niños, y que, con una vez que fueran enviados a la dirección, “con eso tenían para enderezar el camino”.
“Mamá la maestra Macrina me castigó, pero ya me voy a portar bien porque no quiero que me manden otra vez a la dirección y que me castigue la directora”, así le decían sus hijos sobre los castigos que la directora aplicaba.
@periodiconotus Macrima Uribe, uno de los pilares de la educación en Abasolo Solo una caída logro que la “señorita Macrina” dejara su vocación y pasión por la educación en los niños de Abasolo. #abasolo #Macrina #EscuelaCunaDeHidalgo #Abasolenses #Personajes ♬ sonido original – Periódico Notus
Otro de los recuerdos que se tienen de la maestra es que ella siempre guarda un arreglo impecable, siempre que salía a la calle o que recibía visitas, lucía de manera excepcional, siempre con ropa elegante, bien pintada, sus joyas y siempre con tacones jamás usaba zapato de piso.
En un momento la vecina le comentó a Toño un sobrino de la maestra que tras la muerte de la directora se quedó al frente de la casa, le dijo que si le podía vender una maceta a lo cual accedió, es una maceta grande muy bonita que hasta la fecha tiene en su hogar y es un bonito recuerdo de la amistad que tuvo con la Maestra.
Una vez que la maestra murió los sobrinos de Macrina se dedicaron a vender las cosas que la maestra tenía en su casa, según cuentan ponían una mesa en las afueras de la casa y ofrecían las antigüedades, las plantas, las macetas y los regalos que los niños le habían regalado a la maestra, durante toda su carrera como docente.
La amiga de Macrina refirió que la casa quedó intestada, y al morir la maestra al parecer varias personas pelearon la posesión de la casa y ante tanto juicio y peleas, la casa se fue deteriorando, y destruyendo hasta quedar en las condiciones que ahora se encuentra, y según se cuenta el juicio sobre la posesión de la casa aún continúa después de más de treinta años de la muerte de Macrina Uribe.
Biografía
María Transito Macrina Uribe Vaca nació el 14 de enero de 1904 en la Piedad, Michoacán. Llega a Abasolo acompañando a su padre que era empleado del Gobierno, En el año 1925 inicia sus actividades como maestra y fue hasta 1960 donde estuvo en la escuela “Cuna de Hidalgo” continúo como directora de dicho plantel, estuvo 72 años en Servicio Docente, era tanta su vocación que no quiso jubilarse y fallece en servicio.
Su legado perdura en generaciones de alumnos y en la institución que lleva su nombre