
Lizet Galván Cortés se pasa más tiempo en la ciudad de México y cuando regresa al estado se refugia con la “socialité” de León. A casi seis meses de iniciar su gestión como titular de la Secretaría de Cultura aún no entrega a la gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo su plan de reestructuración y nuevos proyectos para una secretaría que en los hechos maneja 30 millones menos que lo manejado en 2024 por su antecesor, el Instituto de Cultura de Guanajuato, y que enfrenta varios flancos de conflicto, con dos más fuertes: el teatro del Bicentenario Roberto Plasencia Saldaña y la editorial La Rana.
Con sólo experiencia como gestora cultural, principalmente en instituciones privadas, la secretaria supo que trabajadores del teatro del Bicentenario, que apenas montará su primera ópera en casi un año, están inconformes por las condiciones laborales. La respuesta fue cesar al titular del espacio, Jaime Ruiz Lobera, quien se irá el 31 de mayo, a unos días del montaje de la obra “La Traviata” (5, 7 y 8 de junio).
En el caso de la editorial, la comunidad literaria de la entidad se inconformó porque la página digital de La Rana fue pasada a la de la Secretaría. Era un espacio plural, que daba voz también a escritores y editores independientes. Galván se mantuvo en la decisión y optó por también echar a Mauricio Vázquez González, titular de la editorial, hecho que ha levantado voces de protesta en la comunidad literaria.
Este domingo se darán a conocer los relevos, pero aún se desconoce si la gobernadora ya tiene el proyecto de reorganización de la dependencia, sus criterios y planes. La secretaria convocó a una reunión con la comunidad literaria para el 5 de junio. Dependerá mucho de quién releve a Vázquez González para que pueda enfrentar a un sector inconforme por el rezago de apoyos y de convocatorias para certámenes.
