Pénjamo, Guanajuato.- Los tradicionales churros con azúcar “El Coquis” llevan más de 25 años siendo parte de la vida cotidiana de los penjamenses. Este negocio familiar fue iniciado por Jaime y Norma, quienes, sin receta alguna, experimentaron hasta perfeccionar la preparación de la harina. Con perseverancia, lograron superar las dificultades del inicio y dar vida a los famosos churros “El Coquis”, un legado que sigue vigente hasta hoy.
El nombre “El Coquis” tiene una historia especial detrás. Era el apodo del hijo de Jaime y Norma, y tras su fallecimiento, el sobrenombre se pasó a Jaime. Al fallecer él también, el apodo quedó como parte esencial de la identidad del negocio, que hoy en día es sinónimo de tradición y sabor para los habitantes de Pénjamo.
El éxito de Churros “El Coquis” no solo radica en la calidad de su producto, sino también en el cariño y apoyo constante de su fiel clientela, quienes reconocen el esfuerzo y dedicación que hay detrás de cada pieza. “Nos felicitan, que están muy buenos, es un orgullo” dijo uno de los familiares que atienden el negocio.
Este negocio familiar no solo se ha mantenido en el tiempo, sino que también es el sustento de cuatro familias que dependen de él para vivir.
Con más de una década al frente del negocio, los actuales responsables siguen agradeciendo a Jaime por las enseñanzas que les dejó en vida, manteniendo la calidad y el espíritu que han caracterizado a “El Coquis” durante tantos años.
La tradición de estos churros sigue creciendo, siempre respaldada por el aprecio de la comunidad, quienes con su preferencia han permitido que este legado continúe cumpliendo más años al servicio de Pénjamo.