Irapuato, Guanajuato.- El Templo del Hospitalito es un edificio emblemático que forma parte de la identidad y llena de orgullo a las y los irapuatenses.
Fue construido por los indios tarascos; para 1610 era uno de los cuatro templos ya edificados en la ciudad, que este 15 de febrero alcanza los 475 años de su fundación.
Los datos que resguarda el Archivo Histórico Municipal, señalan que no fue construido como actualmente lo conocemos, pues alrededor del siglo XVII, solamente era una capilla pequeña.
Durante el siglo XVIII, fue reconstruido y, para 1733, Crispín Lorenzo, un indígena tarasco, se dedicó a tallar toda la fachada del templo que actualmente conocemos, con un estilo barroco.
El Templo de Nuestra Señora de la Misericordia, ahora nombrado Hospitalito, fue llamado así debido a que Vasco de Quiroga, primer obispo de Michoacán, al llegar a la Nueva España, tenía la idea de no solamente evangelizar a los indios, sino de inculcarles una manera de vivir, en la que se apoyaran mutuamente y ayudaran a los enfermos y necesitados.
Por ello, fundó los llamados Templos Hospitales, en los que se atendía en un anexo, a las personas enfermas; con el tiempo la gente identificó el recinto en Irapuato como el Templo del Hospitalito.
Hace más de 100 años, el Ayuntamiento en funciones en 1916, solicitó al entonces presidente de la República, Venustiano Carranza, la demolición del Templo del Hospitalito.
De lo que no se tiene certeza es de sí el Presidente de México de 1916, dio o no respuesta a la petición, por lo que la demolición del recinto, nunca procedió.