“No podemos dejarnos dominar
por la angustia del desempleo”.
Abel Pérez Rojas.
Opinión.- Ejemplos a seguir son aquellos casos de jóvenes que sobreponiéndose a las dificultades hacen lo necesario para, en el ejercicio de su libertad, cumplir con sus sueños, a pesar de lo convulso del escenario global, social, político y económico. Es el caso de la banda española de metal Tears of Martyr.
De acuerdo con un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) los jóvenes ocupan el 18 por ciento de la población mundial, si se considera sólo el rango entre 18 a 24 años de edad.
La juventud global de hoy encara problemáticas que como la falta de empleos dignos, la tensión que implica ser puente de transición entre los migrantes y los nativos digitales, la persecución, encarcelamiento y muerte por sus ideas políticas, el reclutamiento por las bandas criminales, las adicciones, entre otras.
En el caso laboral, según la Organización Internacional del Trabajo, el desempleo de la población juvenil mundial se tasa en alrededor del 13 por ciento, por supuesto dicha cifra ha recibido diversas críticas pues se considera que en realidad la cantidad podría ser mucho mayor.
No obstante lo anterior, hay países como España en el que el paro laboral es exorbitante, por ejemplo, la semana pasada en el marco de una campaña de denuncia por la banalización de la belleza juvenil, el Consejo de la Juventud puso el dedo en la llaga al remarcar que la tasa de desempleo de los jóvenes es del 54 por ciento, y sólo 2 de cada 10 consiguen emanciparse
Ese es el contexto social del cual proviene Tears of Martyr, la banda de metal que la semana pasada dio su primer concierto en América, en la ciudad de Puebla, México.
Tuve la oportunidad de ser el primero en conversar a escasos dos minutos de que Berenice Musa, Miguel Ángel Marqués, Adrián Miranda y Doramas Párraga bajaran del escenario.
En sus palabras resalta la felicidad por haber cumplido un sueño y ahora estar compartiendo su talento con personas de tierras tan lejanas.
Parecen muy distantes aquellos días de la década de los años noventa cuando decidieron conformarse en Islas Canarias. La grabación de diversos demos, la emoción de abrir conciertos a bandas internacionales como: Dark Tranquility, To/Die/For y Swallow The Sun.
Ya entrados en la segunda década del siglo XXI Tears of Martyr graba en Italia Tales y posteriormente dicho material se edita bajo el sello alemán de Massacre Records.
La felicidad está a flor de piel en cada uno de los integrantes de Tears of Martyr y no dejo de pensar en la situación laboral juvenil de España y por supuesto de México, pienso en lo que deberán retomar al regresar a su país, imagino su periplo, me conmueve su unidad de familia, en fin… me reconforta el espíritu que se sobrepone a la adversidad.
¡Enhorabuena Tears of Martyr!