Pénjamo, Guanajuato
En Pénjamo nació una mujer destacada que murió siendo destacada, la capitán primero en enfermería: Patricia Jiménez Fonseca. Hace poco más de un mes perdió la vida, aunque su legado de enseñanza quedará por varias generaciones.
Paty como la conocían sus amigos, alumnos y familiares, nació un 13 de julio del año 1966, en un poblado de Pénjamo, ahí estuvo acompañada de sus padres y hermanos; siendo joven decidió enrolarse en la escuela de enfermería, pero del Ejército Mexicano, donde logró el título de Capitán Primero.
Al paso de los años, fue la jefa de enseñanza de enfermeras en diversos hospitales, terminando en el Hospital de Pénjamo, donde era originaria. Hace poco más de dos años comenzó a estudiar una maestría en enseñanza para mejorar su estilo de enseñanza con sus alumnas enfermeras.
Sin embargo, enfermo y tuvo complicaciones en una de sus piernas, al grado de tener que amputarle una de ellas a consecuencia de cáncer, según lo que dieron a conocer algunos de sus familiares y ella misma, quien decidió dejar la maestría para dedicarse a su hija y sus cuidados.
El 6 de diciembre del año pasado, tuvo algunas complicaciones que desencadenaron en la pérdida de su vida. El día del velorio, una de sus sobrinas, enalteció su trabajo a través de las bondades que había realizado durante toda su vida.
Paty estaba recostada en la sala de un espacio en el que se ofreció una misa y donde se entonó el himno de las enfermeras mexicanas, “formemos un mundo saludable, con servicio, entrega y valor” de ahí al terminar, miembros de la milicia la acompañaron para darle el llamado último adiós.
“A Paty se le va a extrañar los retos llegaron a temprana edad, siempre comprometida llego a terminar Capitán primera enfermera; Paty te formaron para acompañar la alegría de la vida y también la despedida, fuiste un ejemplo de perseverancia, orgullo de tu familia; agradezco todo lo bueno que dejaste, gracias por haber existido y gracias por haber enseñado” dijo una de sus sobrinas.