Margarita Ceceña Martínez murió 24 días después de haber sido blanco de un ataque en el municipio Cuautla, en el que la bañaron con gasolina y le prendieron fuego; hasta el momento “la Fiscalía de Morelos no ha detenido a ninguna de las personas responsable a pesar de estar plenamente identificados”, denunciaron sus familiares.
Margarita, madre de un bebé, una niña y un adolescente, junto con su madre Andrea Martínez, llegó en el mes de diciembre a la localidad la Ex hacienda el Hospital, situada en Cuautla.
Andrea, necesitaba un clima cálido tras las secuelas que el COVID-19 le dejó y determinaron regresar al pueblo donde nació.
Margarita, de 30 años, determinó tomar el traspaso de una tienda de abarrotes, factor por el que inició una serie de agresiones verbales en su contra por parte de dos de sus primas, sus esposos y su tía- hermana de su madre-.
Y poco a poco fueron escalando.
A mediados de mayo fue brutalmente golpeada por el grupo de familiares, tres mujeres y dos hombres.
Acudió a la Fiscalía de la Región Oriente pero no le quisieron iniciar la denuncia porque “no lo ameritaba, le dijeron que esas eran lesiones menores que básicamente tenía que ir muriendo o muy herida para poder tomarla”, narró Andrea, madre Margarita.
El 1 de julio, coincidieron en el centro y ahí iniciaron las agresiones. Más tarde, Margarita, junto con su madre e hijos, arribaron a la tienda.
El grupo de familiares, las dos primas, sus esposos y la tía, una de ellas con machete en mano, se abalanzaron contra Margarita con insultos.
Sorpresivamente, uno de los hombres de nombre Primitivo, se acercó con un galón lleno de gasolina y en segundos roció el contenido sobre Margarita y su familia.
Andrea, su hijo adolescente y la niña alcanzaron a correr.
Y de un segundo a otro, Primitivo arrojó un cerillo contra Margarita y todo su cuerpo empezó a arder, recuerda una de sus familiares.
Todo fue registrado en vídeo y se escucha la voz de una mujer: “yo namás te digo acercate…”, intentando que sus agresores desistieran del ataque.
De pronto se escuchan gritos y la expresión “ayúdenme”; era Margarita intentando apagar su cuerpo.
Algunos vecinos la auxiliaron para apagar el fuego pero el daño era inminente.
Mientras, el grupo de agresoras y agresores salió corriendo.
La tienda de Margarita también fue incendiada con todo en su interior.
Uno de sus vecinos subió a Margarita a su auto y la llevó al Hospital General de Cuautla “Dr. Mauro Belaunzarán Tapia”, donde le dieron atención primaria pero informaron que debido a la gravedad tendría que ser trasladada a un hospital especializado.
Ocho días después, fue enviada al Instituto Nacional de Rehabilitación, en la Ciudad de México, donde se reportaba que más del 80 por ciento de su cuerpo presentaba quemaduras de tercer grado.
La noche de este lunes perdió la vida, luego de enfrentar varias cirugías en las que los injertos de piel no fueron aceptados por su cuerpo que se invadió de una infección.
Andrea, madre de Margarita, denunció que a pesar de que presentaron una denuncia en la Fiscalía de la Región Oriente, hasta este momento las autoridades no han hecho nada.
“Le preguntamos a la licenciada que nos atendió en la Fiscalía por qué no los han detenido y su respuesta fue que le investiguemos, dónde están para que manden a alguien a detenerlos, pero me advirtió que debe ser seguro porque si no ella se mete en problemas”, dijo.
Tras la muerte de su hija, Andrea exigió al fiscal estatal Uriel Carmona que se detenga a los responsables y se haga justicia a su hija.
“Yo lo único que le pido al fiscal es que detenga a los responsables, están muy campantes mientras mi hija ha muerto y dejó a tres huérfanos”, dijo.
Hasta ahora, ninguna autoridad del Gobierno de Morelos ni del Ayuntamiento de Cuautla se han pronunciado.
Cuautla, es parte de los ocho municipios con Alerta de Violencia de Género (AVG) desde el 2015, y en los que va del 2020 es la municipalidad con mayor número de feminicidios y casos de desapariciones, según reportes de colectivos feministas.
Tras el ataque, mientras Margarita se encontraba hospitalizada, solo desde el Instituto de la Mujer para el Estado de Morelos (IMM) se pronunciaron para repudiar los hechos.
Además, exigieron la inmediata intervención de las autoridades para la detención de los responsables.
Sin embargo, no brindaron ningún tipo de atención ni establecieron contacto con la familia de la víctima.
Versión oficial de la FGE
Esta noche, la Fiscalía General del estado de Morelos informó lo siguiente:
El 01 de julio se registraron los hechos en donde de acuerdo a lo que al momento obra dentro de la carpeta de investigación, es que se habría generado una discusión entre la mujer víctima y familiares, en donde como resultado habría sido rociada con gasolina y le fue encendido fuego, ocasionándole quemaduras en la superficie corporal.
Derivado de las lesiones fue trasladada para la atención especializada al Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) en la Ciudad de México en donde finalmente perdió la vida este domingo 24 de julio.
En ningún momento ha existido omisión por parte de la Fiscalía del Estado, toda vez que desde el conocimiento de los hechos, a través de la Fiscalía Regional Oriente se inició una carpeta de investigación, misma que ha sido integrada por distintos testimonios y periciales que se han ido ampliando.
Es importante puntualizar que se ha dado puntual seguimiento a los hechos de violencia que desencadenaron el conflicto familiar como se ha mencionado, integrando todos los elementos con la siempre lamentable pérdida de la vida, sin embargo se harán las investigaciones correspondientes también al interior y que siempre exista la atención oportuna e integral a los justiciables.
La Fiscalía Oriente continúa con los actos de investigación que permitan presentar ante la justicia a aquellas personas que cometieron este condenable hecho y en el proceso se realizará la calificación jurídica que corresponda y en ningún momento se han detenido las acciones que garanticen la atención y el acceso a la procuración de justicia para la víctima directa y aquellas que resulten indirectas, y con ello, que estos actos no queden en la impunidad.