Guanajuato, Guanajuato.- Según cuenta la leyenda que en el año de 1830, la capital del Estado de se vio afectada por un virus que provocó miles de muertes en los habitantes del antiguo Guanajuato.
La enfermedad que era conocida como la peste generó temor entre los guanajuatenses de aquella época, las personas que morían a causa del virus tenían que ser enterrados de inmediato para que no se propagara la infección, algunos expertos en el tema señalan que varios contagiados fueron enterrados vivos.
La peste parecía matar a sus victimas pero en muchas ocasiones no era así, solo adormecía a las personas haciéndolas parecer como muertas y eran enterrados, al momento de despertar se percataban de que habían sido enterrados vivos y morían en su desesperación por intentar salir.