Irapuato, Guanajuato.- “Abandonado” es como se encuentra Francisco Javier de 65 años, en un pequeño condominio ubicado en el Fraccionamiento San José. Aparentemente años atrás se dedicó a dar clases de voleibol en la Universidad Quetzalcóatl Irapuato (UQI) aunque ahora se encuentra enfermo, solo y depende de los vecinos.
Tras una denuncia anónima que Notus recibió, se acudió al lugar en el Fraccionamiento San José andador San Tomás interior 4, donde Francisco Javier como se identificó, vive aparentemente solo, en un departamento pequeño de donde se desprende un olor a humedad y se encuentra vacío, sin muebles.
Al arribar al edificio marcado con el número 4, Francisco Javier abrió la puerta, su tono de voz es bajo y tiembla, así como sus manos y sus pies, al parecer sufre del mal del Parkinson, del corazón y la presión pero no recibe tratamiento alguno.
Su rostro luce cansado, su pelo es canoso, sus pies descalzos y las uñas de los dedos parecen que no han sido cortadas desde hace bastante tiempo.
Cuando se le entrevistó en la puerta del departamento, Francisco Javier platicó que fue maestro de voleibol en la UQI y dio clases de futbol en el ya inexistente estadio Revolución.
Francisco Javier platicó que nació en Guerrero, estuvo casado y tuvo 4 hijos aunque ha vivido mucho tiempo en Irapuato, anteriormente en la colonia Las Carmelitas.
Sobre su situación actual, el ex profesor dijo que vive con uno de sus hijos, “quien anda fuera” pero es quien “paga la renta”, aunque según la versión de sus vecinos la situación es totalmente contraria, ya que “se encuentra” en abandono.
Algunos vecinos entrevistados en dicho condominio, quienes omitieron sus nombres por seguridad, narraron que Francisco Javier llegó al Fraccionamiento San José hace dos meses a vivir con uno de sus hijos, pero el domingo pasado fue “dejado a su suerte” y abandonado en el departamento, sin nada que comer.
Uno de los vecinos que ha ayudado a Francisco Javier, aun y cuando se encontraba viviendo con su hijo, refirió que Francisco Javier fue abandonado por su familia, su hijo lo dejaba solo, sin comer e incluso era maltratado por su condición del Parkinson.
Comentó que la misma dueña del condominio ya acudió, por eso es que se sabe que la renta de Francisco Javier sólo fue pagada dos meses por adelantado, los cuales ya pasaron, aunque por el depósito que se dejó aún no ha sido corrido del lugar, el cual finaliza los primeros días de próximo mes. Desconocen cuál será el destino del anciano.
Cabe señalar que el hombre de 65 años, cuando fue entrevistado negó su supuesta situación de abandono y negó necesitar ayuda económica, comida, vestido o de salud.
Según vecinos, esta mañana del viernes, al parecer personal del DIF acudió a la vivienda de Francisco Javier, aunque no se cuenta con información oficial.
Pidieron el apoyo de alguna instancia para que se haga cargo de brindarle apoyo, ya que se trata de una persona de la tercera edad que “se encuentra a la deriva”.