Irapuato, Guanajuato.- María Dolores Almanza de 85 años de edad, mejor conocida como “Lola, La grande”, ha sido una mujer destacada por su sazón en Irapuato y nos contó un poco de su historia.
“Todo comenzó cuando tenía 14 años de edad, mi abuelita, María de Jesús Ortega “Chuche” y mi madre Genoveva Cervantes Ortega, “la china”, vendían atole y tamales, en el mercado viejo de Aquiles Serdán, entonces yo empecé a fijarme como hacían las cosas, hasta que agarre la vendimia por mi parte, pues me iba a la esquina de mi casa con mi olla de tamales y a vender, recuerdo que cada tamal lo vendía a 5 centavos”, señaló.
Posteriormente en 1951, cuando se amplió la calle de Sostenes Roche, “Lola, la grande”, comenzó a vender cena, enchiladas, tacos, gorditas y café y hasta la fecha continúa vendiendo lo mismo.
En 1956, María Dolores se enamoró y se casó con Darío Castro, con el cual duro 48 años de casada, lamentablemente falleció, pero el amor dio fruto a 7 hijos, 4 hombres y 3 mujeres que han sido parte esencial de la vida de la afamada comerciante.
“Todos mis hijos me han ayudado y siempre han estado conmigo, soy muy afortunada de tenerlos a todos”, dijo.
“Lola, la grande”, finalizó agradeciendo a toda la gente que ha sido parte de su crecimiento como comerciante, externando la felicidad que le ha dado servirle al pueblo de Irapuato desde hace más de 50 años.