Cuerámaro, Guanajuato.- Don Mariano, un ex campesino del municipio de Cuerámaro expresó algunos de los cambios que ha sufrido el campo desde que él se retiró hace 3 años. Siendo el tema de los precios en abonos y semillas los cambios más notorios.
“Simplemente hace falta fijarse en el tema de los abonos, yo todavía tengo un pedacito de riego, es lo único que ya tengo y le echo dos bultos de abono y ahí ya son $2 mil pesos y la mera verdad ya no sale, pero de todos modos uno tiene que echarle, no lo podemos dejar abandonado”, dijo don Mariano.
De igual manera, otro de los principales cambios son la innovación tecnológica en fertilizantes y semillas.
“Antes si había químicos, pero ahora hay más y más, cada vez le sacan más variaciones a todo, si ha cambiado todo. El bulto de semilla cuando yo sembraba valía $2 mil pesos, $2 mil 500 por muy caro, y ahorita ya no hay algunos que lo compran hasta en $5 mil pesos, pero eso sí, ya te lo venden como que es maíz de mucho rendimiento, reforzado y quien sabe que tanta cosa”, comentó el campesino.
Pero pese a estos cambios el resultado sigue siendo el mismo según don Mariano, pues la gente del campo es la que se sigue viendo cada vez más pobre.
“Y pese a todas estas tecnologías, la gente del campo es la que vivimos más pa´ la madre, más jodidos, más trabajados y con más pobreza, eso es lo que no cambia, los apoyos solo son para quienes siembran muchas hectáreas, pero a uno que no siembra así le pagan lo que quieren, por ejemplo, si el precio del maíz es de $8 pesos, te lo pagan en $5 pesos y la verdad ya no sale, a la gente como le gusta regatear”, finalizó don Mariano.
