Irapuato, Guanajuato.
Rojos de rajas con queso, vedes con pollo, piña, fresa, guayaba, coco, limón, nuez, chocolate, naranja, con esta gran variedad es que Tamales Vallejo ha servido a la ciudadanía en Irapuato por 30 años.
Es un negocio de familia, cuenta don Bernardino Vallejo, quien desde joven aprendió de su mamá a prepararlos para salir a venderlos en un triciclo por las colonias de la ciudad.
Al pasar de los años y por su dedicación por preparar este tradicional antojito mexicano, el negoció ha prosperado y ahora cuanta con dos establecimientos en Irapuato.
La gran variedad de sabores, hace que estos tamales sean únicos en Irapuato, además de que por ejemplo algunos de ellos como los de piña, nuez y guayaba llevan trozos de fruta natural.
“A través del tiempo se han ido implementado más sabores porque al principio nomás se hacía de dulce de fresa y de piña y posteriormente se hicieron de más sabores”.
Don Bernardino y su esposa, dueños de este negocio junto con ocho personas más participan en la elaboración 800 tamales diarios, además de que también tienen a la venta corundas y atole champurrado.
A don Bernardino le gustaría que sus dos hijos continuaran en este negocio que es una herencia de su madre y al cual le ha dedicado gran parte de su tiempo durante tres largas décadas.
