México.- Sixto Valencia no fue el primer dibujante de emblemático personaje, pero si fue el primero en diseñar la apariencia que todos conocemos.
El emblemático historietista falleció a los 81 años durante el este día. Sixto fue estudiante de dibujo publicitario en la Academia de San Carlos; su primer empleo fue en el directorio telefónico en donde realizó la parte grafica de algunos anuncios. Posteriormente se unió a los estudios de los dibujantes Guillermo Marín y José Cruz.
Luego de haber trabajado como ilustrador en diversas revistas entre ellas: Halcón Negro, El Libro Único, Criollo el Caballo Invencible, El Látigo Negro, Biografías Selectas, El Charro de Oro y Milagros de Cristo, le asignaron la titularidad de la más reciente revista semanal, Memín Pinguín, la cual fue escrita por Yolanda Vargas Dulché.
Es preciso recalcar que dicho personaje ya había aparecido en una historia dentro de la revista Pepín, dibujado originalmente por Roberto Cabrera, pero el aspecto grafico que conocemos de Memín Pinguín se debe al estilo caricaturesco de Sixto Valencia.
Sixto Valencia dibujó 372 historias de Memín en la década de los sesentas, mismas que fueron reeditadas en tono sepia en la primer década de ochentas, alcanzando increíbles ventas de hasta 1 millón de ejemplares por semana. Ya para 1985 se le pidió a Valencia que nuevamente realizara 372 cómics de dicho personaje pero ahora en tamaño más grande y a color.
Entre otros proyectos de Valencia se encuentran: una adaptación del Periquillo Sarniento, la adaptación en cómic del guión de Ismael Rodriguez El Jorobado y su Extraño Museo de Cera (una película que Pedro Infante ya no pudo realizar), Yo Leona, La Serpiente Desplumada, Los Amigos de Fox (un cómic que se usó como publicidad durante la campaña presidencial de Vicente Fox), El Caballero de la Mesa Cuadrada y Tina Poblana.
En sus últimos años de vida Valencia enfrentó problemas por los derechos de Memín Pinguín, ya que la Editorial Vid comenzó a publicar otra vez la revista, pero usando dibujos calcados de los originales de Sixto Valencia con el fin de no pagarle por reeditar la publicación. Fue cuando el autor comenzó la batalla por los derechos de autor del personaje, enfrentando a Manelick De la Parra, dueño de la editorial. Después de un largo juicio, se reconoció a Valencia como titular de la imagen gráfica de Memín Pinguín, misma que él creó, pero el nombre del personaje pertenece a De la Parra.