A un día que el “reelegido” presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, expulsara “a un diplomático estadounidense del más alto nivel”, el gobierno de la Unión Americana exigió a dos homólogos venezolanos abandonar ese país en un periodo no mayor a 48 horas.
Heather Ann Nauert, portavoz del Departamento de Estado del país vecino informó a través de un comunicado que dicha decisión es una represalia por la expulsión de Todd D. Robinson, encargado de Negocios de Estados Unidos en el país sudamericano, considerado persona “non grata”. Los expulsados sudamericanos son:
El encargado de Negocios de la Embajada de Venezuela,
Y el vicecónsul General del Consulado de Venezuela en Houston, Texas.
La funcionaria federal añadió:
“Nuestros funcionarios de la Embajada han llevado a cabo sus deberes oficiales de manera responsable y consistente con la práctica diplomática. Rechazamos cualquier sugerencia de lo contrario. Venezuela no es víctima de linchamiento político ni financiero”.
Este panorama se presenta luego que el pasado domingo Maduro Moros resultara reelecto en un poco transparente y cuestionable proceso comicial, mismo que ya fue rechazado por al menos diez países del continente americano, incluyendo al neutro Canadá.