Irapuato, Guanajuato. “Me timaron, les compré un teléfono por el face, pagué, fue el Uber a San Antonio de Ayala y ahí al chófer lo reportaron y ya no me quisieron dar nada”, dijo Raúl un hombre que presuntamente fue defraudado por una pareja que vendía un celular por la plataforma de Facebook y los presuntos vendedores viven en San Antonio de Ayala.
La historia de Raúl es común a la de otras víctimas que confiaron en la venta, especialmente de celulares por personas que viven en una de las zonas más exclusivas de Irapuato y es que están identificados, tienen el celular y saben la calle y el número de la casa en la que viven.
Según el modus operandi, es que ofrecen un celular de alta gama a un precio bajo, por ejemplo, en este caso fue un Iphone 14 que lo ofrecen en 10 mil pesos, es decir, a mitad de precio y luego de tener al comprador, simulan que no lo pueden ir a entregar y que van a salir prontamente.
Acto seguido y con engaños, las personas que lo van a comprar depositan de buena fe, porque obtienen la ubicación del lugar; sitio del que se va a enviar el teléfono a su nuevo propietario, pero al momento que llega el vehículo o incluso el afectado, ya no abren la puerta o bien desde antes de entrar al fraccionamiento, reportan con los vigilantes que no los dejen pasar.
De acuerdo a este tipo de hechos y la versión de uno de los guardias, dijeron que ya se han presentado varias situaciones en el mismo domicilio, detallando que como no hay denuncias, de un lado no es complicado dar a conocer los casos a las autoridades, pues se tratan de depósitos en cuentas que no tienen destinatarios.