Por Alice Juárez
Ver la vida con optimismo no es fácil cuando a nuestro alrededor todo parece estar mal. Tantas malas noticias desalientan a cualquiera por más entusiasta que sea, los medios de comunicación nos juegan en contra cuando nos enfrascamos solamente en las cuestiones negativas; si bien es muy bueno estar informado de lo que sucede a nuestro alrededor sobre todo por prevención, también es bueno cerrar nuestros oídos a opiniones exageradas y fuera de contexto.
En lo personal estos últimos meses he escuchado como nunca la frase ¡Y peor que se va a poner todo! Seguramente al igual que yo lo has escuchado y de igual manera has sentido el desaliento y esa sensación de incertidumbre que se crea alrededor de las situaciones que nos hacen sentir inseguros o en riesgo, supongo que es normal debido a las dificultades que nos ha tocado vivir a todos prácticamente lo que va de este año y aun así la vida sigue y de nosotros depende la manera en que decidamos de seguir viviéndola.
Podemos sin duda seguir viendo todo de manera negativa y hacer más pesada la carga o seguir dando pasos en el camino tratando de aligerarla. Sé que te estarás preguntando como poder hacerlo y en honor a la verdad a mí también me ha costado trabajo, sin embargo, si solamente observamos un poco lo bueno que tenemos alrededor nuestro será más fácil.
Cierra tus oídos a comentarios que magnifican las malas noticias; utiliza tu propio criterio y no seas participe colaborando a difundir noticias sin fundamento.
No veas solo lo malo de las situaciones y dale valor a lo bueno; agradezcamos por lo que, si tenemos, salud, familia, tú compañer@ de vida, grandes amigos, hay alimento en nuestra mesa gracias a Dios, tenemos ilusiones en nuestro corazón y aunque digamos que no aún tenemos esperanza de un futuro mejor.
Comienza a hacer declaraciones buenas cada día, es increíble, como cambia todo en nuestro entorno cuando en lugar de alimentar nuestros miedos decretamos días maravillosos, ¡Inténtalo, te vas a sorprender!
El mundo está lleno de malas noticias, de dolor y desaliento; la buena noticia es que cada uno de nosotros podemos aportar nuestro granito de arena para anunciar algo bueno y aunque nos cueste un poco seria bueno comenzar a hacerlo.
Hoy querid@ amig@ te desafío a hacerlo; comparte una buena noticia con todos, utiliza este medio o tus redes sociales, ¡Anda, no todo es malo! Cuéntanos que estas celebrando, cuando es tu cumpleaños, comparte con nosotros una sonrisa y permítenos sonreír contigo.
¿Te comparto mi buena noticia de hoy?
¡Estoy feliz, seré nuevamente abuela!