En un inicio, la audiencia fue pública, pero a petición del juez, tras unos minutos se convirtió en privada.
La primera parte de la audiencia, que se llevó a cabo de 21:52 a 22:07 horas, se pudo ver a la pareja vestir ropa de la prisión, pero ya sin portar los chalecos antibalas que portaron durante su traslado hacia los reclusorios.
En los minutos que la audiencia fue pública, se pudo ver tranquilos a los dos imputados, y ella, serena, respondió a los señalamientos del juez con monosílabos “sí” y “no”. Mario Alberto, por su parte, permanecía absorto y con la mirada perdida.
Ninguno de los dos quiso declarar en la audiencia, y el Juez de Control dio plazo de cuatro meses para el cierre de la investigación, tiempo en el que la pareja permanecerá en prisión.