Irapuato, Guanajuato.- “Si volviera a nacer, volvería a ser carnicero”, son palabras de Arturo Ramírez quien desde 1960 se dedica a la carnicería, según Arturo inició trabajando con su padre en el hoy extinto mercado Aquiles Serdán y desde entonces él y uno de sus hermanos han hecho de la carnicería su oficio de toda la vida, actualmente Arturo atiende su carnicería “El Porvenir” en el mercado Hidalgo.
Como parte de las anécdotas que ha vivido en su carnicería, Arturo recordó la inundación de Irapuato en 1973 cuando junto a su hermano le tocó recibir el agua al interior de su negocio y por mala fortuna “toda la mercancía se echó a perder, se enlodo todo”.
“La inundación de 1973 fue horrible ya estábamos en este mercado, nos empezaron a decir que venía el agua, no la creíamos y nos llegó subió un metro y medio tuvimos que quedarnos arriba del mercado y ahí soportamos la inundación”
El comerciante destacó que su trato hacia el cliente siempre es el mejor ya que en su carnicería se ofrece carne de calidad y “Aquí hacemos el corte que la gente necesite pero de carne de calidad no nos gusta vender carne con clembuterol, vendemos cosas buenas”
“Aquí hacemos el corte que necesite el cliente pero de una cosa bien hecha y buena porque no nos gusta vender carne con clembuterol, nos gusta vender cosas buenas, esto es una dinastía desde 1950 con m i padre y hasta la fecha seguimos mi hermano y yo”.
