Pénjamo, Guanajuato. – San Juana Martínez, una vendedora local en Pénjamo, ha estado sirviendo sus “deliciosas” tortas durante más de tres décadas, su especialidad es la torta de cecina, una receta que ha “conquistado” los paladares de los habitantes locales y visitantes.
San Juana abrió su negocio hace aproximadamente más de 35 años, y desde entonces, ha sido un lugar de parada “obligatoria” para aquellos que buscan una experiencia gastronómica auténtica, si bien ofrece una variedad de opciones de tortas, la de cecina es la que más se vende, atrayendo a clientes de todas partes.
El “secreto” detrás del éxito de las tortas de San Juana radica en la combinación perfecta de ingredientes y su meticulosa preparación, cada torta se elabora con pan suavemente calentado con mantequilla, se le agrega aguacate fresco, chiles, mayonesa y, por supuesto, generosas porciones de cecina; el resultado es una delicia que hace que los comensales vuelvan una y otra vez.
El negocio de San Juana cierra alrededor de las 4 de la tarde, y gran parte de su clientela proviene de los ranchos cercanos, es un lugar donde la comunidad se reúne, comparte historias y disfruta de la rica “tradición” culinaria de la región.
Además de servir a los residentes locales, San Juana también juega un papel vital en la exportación de cecina. Estados Unidos es uno de los destinos principales para esta “delicia”, con pedidos que llegan en kilos para ser enviados al otro lado de la frontera. La cecina es apreciada por su larga vida útil, y esto ha hecho que su demanda crezca tanto en territorio nacional como internacional.
Además de Estados Unidos, San Juana envía sus productos a ciudades vecinas como Irapuato y Guanajuato Capital, donde la cecina también es muy solicitada, para prepararse de diferentes formas dependiendo los gustos de cada persona o familia.
