Irapuato, Guanajuato.
“Sí se escucha muy feo eso de que le damos prioridad a nuestro trabajo y es el problema de cada día en la casa con los hijos, con los papás, con las esposas, que no estamos cuando ellos realmente nos necesitan pero al final comprenden lo que conlleva mi trabajo y que la gente me necesita”.
Así lo expresó Jorge Espinoza Trujillo de 24 años quien ha dedicado 10 años a ser bombero, siete como voluntario y tres como asalariado, “te vas acostumbrando a no estar en casa”, comenta.
Para Jorge Espinoza estas fechas de celebrar con la familia como el 24 y 25 las podrá pasar con su familia, sin embargo otra fecha importante como el 31 de diciembre, no lo hará ya que le tocará cubrir turno.
Casado y con dos hijos refiere que “mis hijos están muy chicos y aún no entienden la magnitud de no estar estas fechas con ellos, pero el día de mañana espero que comprendan igual que su mamá”.
Al menos Jorge será de los que podrá disfrutar de una cena en familia el Día de Navidad, donde habrá tacos sudados, pozole y tamales.
“El día 31 entro a las 8 de la noche y ya no vería a mi familia hasta el día 2 de enero a las 8 de la mañana”, comenta. “Me dicen que cómo no van a pasar el Año Nuevo conmigo y las diversiones de los juegos, porque donde vivo tocan los últimos Barrios en la colonia y no estoy con los hijos viéndolos pasear”.
Sin embargo la pasión por su trabajo y la de su familia le trae algunas complicaciones “pero no quiero anteponer ni la una ni la otra pero hago el intento de estar con ellos, una llamadita a las 12 de la noche…felicidades hijo y que sigan así y que le echen ganas a sus estudios”, siempre y cuando no tenga emergencias que atender.
Aunque no estará con la familia en esa fecha, entre los compañeros bomberos llevarán a cabo una cena entre los que cubrirán el turno, al parecer esta vez cenarán birria.
“No sé a qué se debe que a las 12 de la noche llega una calma, nos da chance de comer algo y otra vez empiezan los baldíos y eso… pero la convivencia es buena”.
Este año él junto con otros 27 compañeros, entre asalariados y voluntarios trabajarán el 31 de diciembre para cubrir toda la ciudad de Irapuato, “yo era de esos voluntarios que venían en esas fechas por eso la familia está acostumbrada a no verme, cenaba, comía y a la 1 o 2 de la mañana venia aquí; ya había convido con mi familia y me venía con los compañeros a ayudar”.