Por Gerry Orozco.
Manuel Doblado, Guanajuato.- Desde niña jugaba a ser maestra, tomaba las cajas de los casetes de su papá simulando una computadora, sentaba a sus hermanos y muñecos de peluche alrededor de ella y se ponía a darles clase, “siempre quise ser maestra” señaló Margarita Ornelas Barrera de la comunidad de Agua Tibia del municipio de Manuel Doblado.
La doblarense Inició su labor docente cuando fue invitada por la maestra titular del jardín de niños de San Luis “La Charca” a ser su asistente; en ese entonces Margarita solo contaba con la secundaria terminada lo que era el temor principal que le impedía aceptar la invitación, pensaba que no tenía la preparación suficiente para desarrollar el trabajo.
La maestra titular del preescolar la animó y la convenció, pero en poco tiempo esta fue reubicada en otra escuela, en la cabecera municipal; como consecuencia Margarita se quedó al frente del grupo. Pensaba que no iba a ser buena maestra pues le faltaba experiencia y conocimientos.
Consciente de sus limitaciones, y llena de ganas por desempeñar un buen papel al frente del preescolar, la maestra se inscribió en la Universidad Virtual del Estado de Guanajuato (UVEG), en donde terminó sus estudios de preparatoria y actualmente cursa estudios universitarios en pedagogía en la misma universidad, aseguró Margarita.
Puntualizó que uno de los grandes problemas que ha tenido para realizar sus estudios es que en esta universidad se hace indispensable el uso del internet y pero el servicio que llega a la comunidad es muy deficiente, y en el jardín de niños donde labora hay una antena de internet, pero no hay luz.
Sin embargo y a pesar de estas dificultades poco a poco ha salido victoriosa cuatrimestre tras cuatrimestre y ha avanzado en sus estudios, todo por el bien de sus alumnos.