GUANAJUATO, GTO.- Fue uno de los desfiles con mayor duración en los últimos años, pero también las calles tuvieron menos observadores. Libia Dennise García Muñoz Ledo el ceremonial de celebración del aniversario 214 de la Toma de la Alhóndiga de Granaditas.
Un acto heroico del que se omite la matanza de españoles refugiados en el almacén de granos habilitado como fortaleza y que conserva dos referentes de memoria de aquellos momentos: los muros descarapelados debido a las piedras lanzadas por los insurgentes y los letreros en las esquinas del edificio con el nombre de los insurgentes cuyas cabezas fueron ahí colocadas.
Libia vivió su luna de miel, cobijada por la burocracia estatal y municipal, en un arranque entre confeti y porras, con el “¡gobernadora, gobernadora!” que ha sonado y resonado en estos días.
El desfile tuvo como característica esencial destacar la parte civil. Lo policíaco y lo militar fue dejado para el cierre. El cronista de la ciudad, Eduardo Vidaurri, explicó detalles históricos sobre la fecha, tan históricos como el hecho de que Guanajuato tiene a su primera gobernadora.
Vidaurri destacó la importancia de conmemorar cada año el aniversario de la Toma de la Alhóndiga, así como a todas las mujeres y hombres caídos durante la prolongada y terrible guerra de independencia.
Por eso desfilaron mojigangas, alebrijes, ranas de colores; estudiantes de todas las escuelas, funcionarios de Gobierno, Ayuntamientos, asociaciones civiles y sindicatos, marcharon ante la ciudadanía capitalina, ataviada este año de gorras de ranas (por el nombre «Quanaxhuato» lugar de ranas) en un ambiente de color y fiesta.
Danzantes y bailables, una pequeña delegación de Xichú, último reducto del perredismo en el estado, que hizo sonar al huapango arribeño.
Desfilaron también mujeres disfrazadas de Catalina Dulché, María Manuela Herrera, Frida Khalo; así como una representación del escudo del municipio de Guanajuato, que recientemente adoptó el estado. “El Gobierno de la gente” aparecía por doquier con su logo de estilizada Santa Fe en un círculo, rematada con una corona, cual escudo de equipo de fútbol.
Marcharon asociaciones civiles, sociales, grupos de artesanos y varios contingentes representando a las mujeres que lucharon por la independencia de México y Guanajuato.
Tras el paso de burócratas, comunidad universitaria y escuelas, siguieron cuerpos de rescate: protección civil, Cruz Roja y Bomberos, tanto de la ciudad como de otras localidades del estado. Exhibieron su mejor equipamiento.
Los helicópteros
El cierre fue con los contingentes policiacos y militares. Esta vez los municipios no enviaron patrullas en otros años lo hacían para lucir su equipamiento y personal), pero sí lo hizo la policía local junto a las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado, con una característica que levantó mayor admiración: el vuelo de los cuatro helicópteros del gobierno estatal.
Hicieron vuelo por la plaza de la Paz y se posaron en formación sobre ella.
Luego: Guardia Nacional y unidades de caballería motorizada del Ejército Mexicano y, al final, los contingentes charros.
Libia Dennise estuvo acompañada de su familia y de su Gabinete Legal y Ampliado para presenciar el desfile, así como los representantes del Poder Legislativo y Judicial.
En esta ocasión, las autoridades no subieron a los balcones del Museo de Los Tres Poderes, el ex Congreso, sino que se colocó una tarima en la calle de la Plaza de la Paz.
El desfile comenzó en punto de las 10 de la mañana, saliendo del Jardín de Embajadoras, pasando por Sangre de Cristo, Sopeña, Teatro Juárez, Plaza de la Paz, avenida Juárez, mercado Hidalgo, hasta llegar al Jardín El Cantador, concluyendo pasadas la una de la tarde.
Renovación del Fuego Simbólico
Cuando pasaban los últimos contingentes, la gobernadora bajó de la tarima y caminó rumbo a la Alhóndiga de Granaditas, en donde recibió a contingentes de charrería que portaban el Fuego Simbólico que procedía de San Miguel de Allende.
Ahí hubo mensajes diversos y se realizó la tradicional renovación del Fuego Simbólico: de la antorcha que traían los charros, la gobernadora prendió una antorcha y llevó una pequeña flama al pebetero ubicado al interior de la Alhóndiga.
El mensaje de la gobernadora:
“Hoy honramos la lucha de mujeres y hombres y mujeres valerosos que nos permitieron tener este México independiente; hoy honramos la historia y la memoria de nuestro estado un estado glorioso y maravillosos del que nossentimos profundamente orgullosos”.
Exhortó a sumar esfuerzos y a trabajar de la mano, sociedad y gobierno, para que Guanajuato tenga los mejores ciudadanos y construir, en conjunto, un Estado que llene de orgullo y que sea el Guanajuato de la Gente.
Todo terminó pasadas las dos de la tarde.
Fueron alrededor de cuatro mil trescientas personas las que partieron del Jardín de las Embajadoras y desfilaron en el Centro Histórico de la ciudad hasta llegar a la Alhóndiga de Granaditas y luego dispersarse: unos, a disfrutar la ciudad; otros, a regresar a su lugar de origen.
Libia vive su luna de miel, pero hasta ahora ha estado más cobijada por el panismo y la burocracia que por la gente. La oposición espera su turno.
