Irapuato, Guanajuato.- Luz Mosqueda Hernández tiene 73 años y de esos 20 años sin ver a sus hijos Carlos y Marcelino quienes partieron a Estados Unidos tras el “Sueño Americano”. Por fin ese reencuentro familiar aunque no será en México se dará en tierras americanas, en unos días.
J. Dolores Mosqueda Raya esposo de Luz Mosqueda y quien falleció hace cinco años, no pudo volver a sus hijos desde aquel día en que a los 16 y 20 años, Carlos y Marcelino, respectivamente, decidieron irse a los Estados Unidos de ilegales, sin embargo a Luz se le llena el corazón de alegría y esperanza por esta oportunidad que tuvo a través del Programa Mineros de Plata.
“Veinte años que tengo sin verlos, ahora sí Dios me da licencia iré a verlos, gracias al grupo Mineros de Plata”, externó Luz Mosqueda.
Este domingo 21 de agosto ella será trasladada con apoyo del Municipio en un viaje particular al Aeropuerto de León y de ahí tomará un vuelo hacia Los Ángeles, California, pagado por el Instituto del Migrante para reunirse con sus hijos Carlos y Marcelino en Reno, Nevada, con quienes podrá estar durante un mes en el país vecino y regresar a casa en la comunidad de Serrano.
Con alegría en los ojos, Luz Mosqueda se imagina el reencuentro con su nueva familia además de sus dos hijos, ya que la esperan también dos nueras y ocho nietos en Estados Unidos, a quienes conocerá por primera vez en persona y con quienes sólo tiene comunicación por teléfono.
”A veces les entiendo, la verdad le voy a decir casi ni les entiendo, hablan casi puro inglés; de hecho la hija de Carlos le hicieron su fiesta de XV años y estuvo muy bonita porque me la pasaron por foto también y querían que estuviera allá pero no pude. Decían – ¡Ay mamá! para saber de este grupo a lo mejor hubiera estado acá en ese entonces— pero dicen que vale más, tarde que nunca.
Actualmente Luz Mosqueda vive con los 10 hijos que le quedan en Irapuato y sus nietos en la comunidad de Serrano, en una casa humilde pero donde se percibe la unión familiar.
Recordó que sus hijos Carlos y Marcelino se fueron a Estados Unidos porque “La situación que tenemos aquí, no hay trabajo, estábamos muy necesitados y se fueron, gracias a Dios allá están todavía”.
Luz se encuentra tranquila y sin nervios por volver a ver a sus hijos, pero nunca ha subido en un avión, esta experiencia también es nueva y diferente en su vida.
Contó entre risas que sus hijos le dicen “Mamita se duerme para que no mire nada no se nos vaya a caer del avión; le digo, no mijo me voy a tomar una pastillita y me quedo bien dormida”.
Toda esta felicidad es compartida entre toda la familia Mosqueda, “Están bien felices, porque luego de tantos años que bueno que ahora si los vamos a volver a ver y primeramente Dios, estamos allá y si no pues ni modo. Tanto he pensado que no sé que decir, un beso, un abrazo, felicidades de volvernos a ver que Dios nos dio la oportunidad de volvernos a ver”, manifestó Luz sobre este reencuentro de mamá e hijos.