Cuerámaro, Guanajuato.- El cronista de Cuerámaro Julio Alvarado Soto, compartió con el equipo de Notus Noticias y nuestros lectores, sobre la historia de este lugar.
En el año de 1543, el capitán Juan de Villaseñor Orozco, recibió la encomienda de los terrenos que ahora forman parte del municipio de Cuerámaro y funda la hacienda San francisco Cuerámaro.
Se fundó, cerca de las faldas de la Sierra de Pénjamo, y comenzó a caer mucha agua a Cuerámaro, caso que llevó a la construcción de instancias ganaderas, en Tupataro, San Gregorio, Cienaguillas, Tres Villas y Saucillo.
Tiempo después, se hizo la presa del aguacate, nombrada así porque fue construida en la Cañada del Aguacate, todavía se encuentra en función y ahora pertenece al ejido de Cuerámaro.
En 1743 a 1749, se construyó la acequia y pasaba por en medio de la mancha urbana, posteriormente durante la administración del priista Emmanuel Padilla Delgado Fuentes se modernizo la ciudad y colocaron bordos, bancas y puentes para que la gente pudiera transitar por el lugar.
Para los cueramaranses, el que modernizaran la zona centro, fue un golpe duro, pues disfrutaban mucho los fines de semana cerca del rio en compañía de su familia y amigos.
Unos cueramarenses ubicados en la calle del agua, en su comercio, platicaron lo bonito que era antes ver el rio caudaloso pasar por ahí.
“Se ponía bien bonito, disfrutábamos con la familia y hasta con el novio, era el lugar donde se daban las citas, ahorita ya puro celular, pero antes nos quedábamos de ver ahí, también mi abuela y sus amigas ahí lavaban la ropa y los pañales, era bien bonito”, contó la esposa de Francisco.
Recuerdos y bonitos momentos se vienen en la mente de la gente al recordar lo que antes era la acequia.
¿Sabías que?…
Una acequia es una zanja o canal a cielo abierto para conducir el agua de regadío, de abastecimiento a poblaciones o fines similares
