Por: Ariadna Hernández
Irapuato, Guanajuato.- El Puente de Guadalupe diseñado y construido por el arquitecto Nicolás Luna en 1835, es una estructura emblemática de los Irapuatenses que está hecho de mampostería, técnica que consiste en apilar rocas de manera equilibrada y que a lo largo de sus 185 años de vida se ha ido deteriorando a causa de la falla geológica que atraviesa justamente donde está situado, por lo que ha ido perdiendo parte de su estructura.
En mayo del año 2013, le fue retirado uno de sus 4 arcos que estaba a punto de colapsar y para evitar mayor daño se tomó la decisión de cercar el lugar evitando así el acercamiento de las personas al puente para prevenir su desgaste y algún accidente.
Según las autoridades municipales, a finales del año pasado se concluyó un proyecto que sería enviado en este 2020 para su validación al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) a fin de adecuarse a sus normas y especificaciones de restauración para que continúe siendo un atractivo visual, sin embargo pareciera ser más importante la remodelación de calles y avenidas de la ciudad, pues ya vamos a mitad del año y al puente todavía no se le hace nada.
Según lo que se pretende es conservar lo más que se pueda su construcción original pues forma parte de la historia de los Irapuatenses, por lo que se busca la reconstrucción del cuarto arco a base de nuevas técnicas con estructuras especiales, reforzarlo en su totalidad y adornarlo llamativamente a la vista de todos, a lo que los ciudadanos seguimos en espera de tan importante obra.