México.- Un hombre que vivía en una ciudad de Capadocia, región histórica de Anatolia, Turquía, encontró en el sótano de su casa, un portal a una ciudad subterránea. El colono cuando descubrió por casualidad uno de los asentamientos subterráneos más grandes conocidos en Capadocia.
Según los datos que hay hasta el momento, en el año de 1963, el hombre buscaba renovar y ampliar el espacio de su casa, pero al martillar se abrió un resquicio hacia una de las ciudades subterráneas más grandes e impresionantes de la región.
El fantástico lugar se caracteriza por ser conocida por sus paisajes y por las famosas “chimeneas fantásticas” y tiene las cuevas subterráneas de Capadocia, aprovechadas hace muchos siglos por los habitantes, a fin de resguardarse de los numerosos ataques de comunidades rivales.
Las cuevas hechas de material volcánico fueron convertidas en almacenes y capillas, detallando que al parecer algunos arqueólogos creen que fueron los hititas los primeros en realizar tales construcciones, enfatizando que la ciudad subterránea de Derinkuyu tenía 18 niveles y albergaba hasta 20 mil habitantes.
Sabías que…La ciudad subterránea contemplaba una serie de orificios de cerca de 10 centímetros de diámetro que servían como respiraderos y se lograba conseguir suministro de aire respirable por lo menos hasta el octavo nivel bajo la superficie; a partir del octavo nivel eran usadas como almacenes de materiales o incluso como celdas para prisioneros.