Pénjamo, Guanajuato.- Entre las calles Juárez, Allende y las inmediaciones del jardín Ana María Gallaga el olor a perro es bastante fuerte y en algunos puntos es difícil pasar porque están dormidos en las banquetas.
En el año 2020, fue evidenciado que habían sido envenenados al menos 12 perros en el primer cuadro de la ciudad y a partir de ahí supuestamente se iba a iniciar la construcción de un centro de control.
A la fecha es común ver como una gran cantidad de animales viven en las calles de Pénjamo, donde por un lado existen grupos de personas que dicen estar a favor de la adopción de animales en situación de calle, pero en el caso de estos canes por su edad, nadie se les acerca.
Los perros en su mayoría son tranquilos, sin embargo ya se han registrado ataques ya sea personas a las que les ladran o bien pleitos entre ellos mismos.
De acuerdo al último estimado, varios grupos de animalistas calcularon que en el municipio de Pénjamo existen alrededor de mil animales callejeros, pese a que algunos han sido llevados a refugios, pero especialmente a los más pequeños.
El nacimiento de nuevos cachorros ha propiciado que exista una proliferación descontrolada y que en Pénjamo, supuestamente se cuide que no sean sacrificados o envenenados, aunque pocos son los que los atienden.