Líbano
Una boda casi termina en tragedia después de que al novio se le ocurriera celebrar el momento de una extraña manera.
Era sábado por la mañana, los recién casados y los invitados tenían festejando desde un día antes. La desvelada combinada con las bebidas habían provocado que tanto los esposos como los asistentes ya no coordinaran bien sus movimientos. Pero al novio no le importó en lo absoluto y tomó un rifle Ak47, apuntó hacia el cielo y comenzó disparar.
Luego de realizar los primeros disparos, al hombre se le cayó el arma e hirió al camarógrafo del evento. Afortunadamente los disparos no alcanzaron a los demás asistentes.
El herido fue trasladado de emergencia a un hospital donde los médicos le brindaron atención médica. Sin embargo, algo parece haber molestado al novio y a sus amigos y comenzaron a agredir a los doctores y enfermeros.
“Honestamente, no tengo explicación para lo que hicieron. Trajeron al herido y luego golpearon a los que estaba atendiéndolo”, contó Michel Chahine, director del hospital.
Tras la agresión un enfermero resultó con un ojo gravemente lastimado y deberá ser sometido a una cirugía.
Las autoridades han iniciado una investigación.