Pénjamo, Guanajuato.- Ana María Soto Vargas pertenece a las cocineras tradicionales de Guanajuato desde el 2011, es una de las pioneras y reconocida como una de las mejores de Pénjamo. Desde hace 20 años tiene su lonchería El abuelo en esa ciudad donde prepara su exitoso platillo enchiladas Tres Marías.
Incluso Ana María Soto ha demostrado su talento no sólo en concursos internacionales como en España, también hizo casting para entrar al famoso reality show MasterChef en el cual resultó elegida pero al final rechazó la oportunidad por cuestiones personales.
Para ella el trato a la gente, preparar la comida en el momento y la higiene son los elementos indispensables que debe tener su negocio y que debe ofrecer al público.
“Si me piden una milanesa, yo al momento la voy a preparar, los chilaquiles, los huevos, todo lo que yo vendo aquí se hace en el momento”, dijo.
En la actualidad, el platillo más exitoso de su lonchería y a donde quiera que se presenta son las enchiladas Tres Marías, que consisten en una de mole verde de puerco, queso y pollo, una de chile guajillo y otra de mole poblano; platillo con el que ganó el primer lugar en España.
La cocinera tradicional comentó que “Ese platillo desde que lo metí a la cocina tradicional ha sido el estrellato de mi vida y me reconocen por ese platillo, me buscan en los eventos que estoy, si no llevo ese platillo haz de cuenta que no fui, porque ellos llegan directamente a buscar las enchiladas Tres Marías”.
Gracias al talento en la cocina de Ana María Soto le ha brindado la oportunidad de viajar a diferentes países representando a Guanajuato como una de las cocineras tradicionales de la entidad.
Sin embargo todo el éxito y reconocimientos que Ana María Soto ha conseguido tienen un origen, desde que se casó a los 16 años aprendió a cocinar de su suegra y sus cuñadas los platillos que hoy en día realiza y a mejorarlos.
Para Ana María es de “mucho orgullo sentirse que valoran de uno, lo que sabe”, no sólo en su estado si no fuera de su país.
Casting en Master Chef
Ana María Soto realizó el casting en el estado de Nayarit para ingresar al famoso reality show MasterChef México en su segunda temporada, sin embargo aunque su platillo habría sido elegido como los mejores para participar en el programa, al final rechazó la oportunidad.
Gracias a que logró con sus platillos de moronga, cecina con chile, chicharrón y frijoles puercos “como lo hacían las abuelas” y hacer retroceder a la “niñez” de los exigentes chefs Benito y Betty, Ana María lo había conseguido.
Lonchería El Abuelo
Ana María Soto platicó que el nombre de su lonchería El Abuelo es porque su esposo no quería “aceptar” que su hija de 16 años lo había hecho abuelo y fue así que decidieron ese nombre.
“(Su esposo) él tenía 41 años y yo tenía 33, él decía que era su tío, nos fuimos de vacaciones a la playa y regresando pusimos el negocio, no sabíamos que nombre ponerle y me dice mi hija y mi hierno, vamos a ponerle El Abuelo para que a mi papá no se le olvide que es abuelo”, refirió Ana María Soto.
