Irapuato, Guanajuato.- El profesor de la Universidad de Guanajuato e ingeniero mecánico agrícola, Agustín Zavala Segoviano, explicó que en zona del bajío las temporadas de siembra se han reducido a solo una, la temporada primavera – verano, cuando anteriormente también se contaba con el ciclo otoño – invierno.
Explicó el maestro que la reducción drástica de las temporadas de siembra se debe principalmente al nivel del agua que contiene la presa Solís que se ubica en el municipio de Acámbaro. Dicha presa abastece a los agricultores de la zona del Bajío por medio del “Canal de Coria”.
Zavala Segoviano dijo que los cultivos que se han dejado de sembrar en la temporada de otoño – invierno son trigo o cebada, y debido a las pocas precipitaciones que se ha dado en los últimos años se tomó la decisión de dejar la reserva de la presa Solís para solo abastecer el ciclo primavera – verano que requiere menos cantidad de agua que el otoño – invierno.
Ya son cuatro ciclos consecutivos que no se siembra en el otoño, anteriormente era intermitente, algunos años si se sembraba y otros no, pero definitivamente desde hace 4 años ya no se siembra en esta temporada de otoño, relató el catedrático.
Mencionó el académico que sus expectativas para que se pueda reestablecer el ciclo de siembra de otoño – invierno son pesimistas, declaró que “ojalá que haya un buen temporal que surta a la presa Solís y que permita cultivar aunque sea solo el ciclo de primavera verano”.
Declaró el profesor que en la región el promedio de lluvias oscila entre los 600 milímetros de precipitación, y que se requiere un nivel mayor para que haya un excedente del líquido en la presa, y posiblemente, si es que hay un buen nivel de agua en la presa, gestionar para que se reaperture el riego de la temporada Otoño – invierno.
Mencionó maestro Zavala que los agricultores de la zona deberían estar considerando la siembra de algún otro cultivo que no requiera un consumo elevado de agua, como lo puede ser el esparrago o el garbanzo, sin embargo, el nivel de ganancias se reduce con estos cultivos, así que el agricultor debe considerar también el tener otra actividad económica que le permita ya no depender al 100 porciento de los frutos del campo.