Irapuato, Guanajuato.- De campesino, velador, en obras, entre otros oficios son en los que Antonio Gutiérrez ha trabajado toda su vida, nunca un empleo fijo; actualmente pasa hasta seis horas sentado en la Avenida Lázaro Cárdenas para emplearse como machetero, “a veces me voy como nada, no llevo nada a mi cantón”.
A sus 75 años, Antonio Gutiérrez piensa que “con la vejez ya no se puede hacer más de lo que se pudo”.
Antonio pasa los días sentado frente al estadio Sergio León Chávez en busca de una oportunidad de trabajo por unas horas, como machetero para cargar camiones de escombro, aunque esto sólo de deje una ganancia de 125 pesos y al siguiente día vuelva a lo mismo y no corra con la misma suerte.
Recordó que el comenzó a trabajar desde los 10 años de edad, y en toda su vida a lo más que pudo aspirar fue a ser velador, nunca mantuvo un trabajo constante y seguro.
“Muchas de las ocasiones he tenido la manera de obtener un trabajo pero no llega la realidad de que dure”, dijo.
Antonio es un señor casado y tiene siete hijos, uno de ellos aún en casa. Nació en la comunidad de Lo de Juárez pero tiene 30 años viviendo en Irapuato.
“Yo no he tenido cuestión de una tierra para sembrar, yo siempre andaba rentando, pidiendo alquiler de una tierra, era poquillo, no crea que mucha, una media hectárea para conseguir esto, conseguir lo otro, para tener yo mis maneras de seguir viviendo”, platicó.