Querétaro.- Una investigación, realizada por la Universidad Tecnológica de Querétaro, expuso que jóvenes, identificados como la “generación de cristal”, están al límite de un colapso emocional, debido a la sobreprotección y la dependencia tecnológica. La depresión y la ansiedad son consecuencias de
Paulina González López, de la Universidad Tecnológica de Querétaro (UTEQ), dijo que “esta generación fue criada en una burbuja de sobreprotección y comodidades tecnológicas, carece de la resiliencia necesaria para enfrentar los desafíos del mundo. Además, la falta de habilidades sociales y el aislamiento digital los han dejado incapaces de relacionarse con el mundo exterior”
Una parte de este grupo que abarca a jóvenes que nacieron entre el año 2000 y 2010, según la investigación señala que los resultados fueron altos niveles de estrés, ansiedad y depresión, llevándolos al borde del colapso emocional.
Al igual están bajo un rechazo y el estigma social por generaciones mayores, catalogándolos como “inútiles” y “sensibles”.
El grupo de la generación de cristal como así fueron llamados 15% de los participantes estaban lidiando responsabilidades laborales, académicas y familiares, incluyendo el cuidado de hijos, es decir, que estaban casados o tenían algún tipo de relación sentimental que usualmente les traería problemas.
“Este estudio arroja luz sobre la urgente necesidad de brindar apoyo y comprensión a la Generación de Cristal. Si no se toman medidas ahora para abordar sus necesidades y desafíos, corremos el riesgo de perder a una generación entera de jóvenes talentosos y prometedores”, dijo la investigadora.