Por Gerry Orozco.
Abasolo, Guanajuato.- Salvador Hernández mencionó que la sequía, aunado a los altos costos de producción y los pocos apoyos gubernamentales y a los precios que se paga por la cosecha, la siembra ha dejado a los campesinos sin oportunidades para sobrevivir, “si no fuera por las remesas ya mucha gente de este pueblo estuviera en situación verdaderamente crítica”.
Salvador Hernández habitante de Cerrito de Aceves comunidad del municipio de Abasolo, es una comunidad rodeada de dos ríos, el río Lerma y el río Turbio,
sin embargo, ambos ríos están secos desde hace tres años.
Hace unos 10 años atrás ambos ríos abastecían el agua necesaria para satisfacer las necesidades de los productores agrícolas de la zona, “todo el año había agua en los canales de riego” manifestó Salvador, pero esta sequía ha trastornado las actividades del campo.
Salvador recordó que en su niñez el rio Lerma era un lugar de esparcimiento familiar, asistía con su familia a las orillas del río y se metían a bañar en sus aguas, pero en la actualidad los ríos están secos, y si llegan a tener agua esta está contaminada, concluyó el oriundo de Cerrito de Aceves.
