Irapuato, Guanajuato. – Después de una mañana de tensión en la central de autobuses de Irapuato, los trabajadores de la empresa de autobuses Flecha Amarilla han llegado a un acuerdo con la administración, poniendo fin a un “paro” que afectó a varios ranchos y localidades aledañas como: Lo de Juárez, La Calera, Aldama, Zangarro, San Antonio el Rico, Comedero, Márquez, San José de Llanos y Cañada.
La principal fuente de descontento por parte de los operadores de Flecha Amarilla era la falta de un sueldo “digno”; los trabajadores manifestaron su deseo de recibir un mejor salario por su labor, en lugar de depender de comisiones basadas en la cantidad de pasajeros que transportaban.
El desacuerdo provocó el paro de labores momentáneo, debido a que posteriormente se llegó a un acuerdo entre los operadores y la administración estableciendo que los operadores de Flecha Amarilla recibirán un sueldo fijo quincenal, abordando así la principal preocupación de los trabajadores.
Además, se ha mencionado la implementación de un sistema de conteo de pasajeros, conocido como “barra”, con el objetivo de rastrear cuántas personas abordan y descienden de los autobuses, esta medida, sin embargo, generó cierta controversia entre algunos operadores.
Otro de los puntos de desacuerdo previos fue el aumento del precio del boleto para los usuarios, que pasó de 16.50 a 23 pesos por kilómetro recorrido. A pesar del incremento del boletaje, los sueldos de los operadores se habían mantenido igual que como estaban anteriormente (por comisión), lo que había generado inquietudes entre los trabajadores.
En caso de que no se respete el acuerdo alcanzado entre los trabajadores y la administración, se ha acordado que se buscará primero un diálogo directo para resolver cualquier conflicto. Si no se llega a una solución satisfactoria en esta instancia, se considerarán otras medidas para garantizar que sean escuchados y se respeten sus condiciones de trabajo.