Irapuato, Guanajuato.- Después de 40 años de servicio y ninguna mancha en su expediente, a Rogelio Ledesma Gallardo, Policía Primero, se le autorizó su jubilación de la Policía Municipal.
Desde su ingreso a la corporación, Ledesma Gallardo se integró al grupo de la Policía Montada, donde cada día junto a su caballo, salían a vigilar puntos específicos de la ciudad.
Este Policía Primero reconoció que es momento de darle paso a una nueva generación de elementos, que hoy se forman en la Academia, pese a que deja atrás más de la mitad de su vida dentro de la corporación.
“Amo el uniforme que porto, amo la corporación, amo servir, porque siempre ha sido así y pues todo tiene un principio, igual que hoy tiene un final. Por eso he decidido ya dejar mi trabajo aun cuando lo siento mucho, pero ni modo, esto es así y lo que empieza termina”, enfatizó.
A lo largo de su carrera policial, Ledesma Gallardo tuvo muchas satisfacciones, pero la más importante fue haber rescatado a una persona de la tercera edad, quien quedó atrapado en una vivienda que se incendiaba y, a pesar de arriesgar su vida, pudo salvar la de esta persona.
Hoy, Ledesma Gallardo se jubila para estar con su familia, y confesó que extrañará a Lobo, un equino que recordará con alegría, ya que durante muchos años fue su compañero.