Guanajuato, Gto. – Luego de que el pasado 30 de agosto, ediles integrantes de la Comisión de Hacienda, aprobaron apoyar con 741 mil pesos a la Asociación Civil Ciudades Patrimonio para la rehabilitación de la cúpula y colocación de un candelabro en la Basílica Colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato, las obras iniciaron.
La propuesta fue aprobada en la posterior sesión de Ayuntamiento y los recursos fueron liberados. La obra comenzó esta semana.
Una cuadrillla de trabajadores, guiados por especialistas avalados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, comenzaron con la limpieza y resanado del interior de la cúpula.
La parte más deteriorada era la zona de pechinas, como se denomina al pasillo con barandal que se encuentra en la parte baja de la cúpula y donde es necesario colocarse para su limpieza y restauración.
La limpieza, reparación y restauración durará al menos un par de semanas, dependiendo de las dificultades o lo específico de algunos retoques necesarios.
Juan Carlos Delgado Zárate, director del Instituto de Planeación Municipal, destacó que mencionó que era urgente la rehabilitación de la cúpula, pues había riesgo de desprendimiento de material.
Aclaró que sólo será movido un grupo de bancas para facilitar los trabajos y que no se interrumpirán las principales ceremonias religiosas. Quizá se suspendan algunas misas y sesiones de rezo del rosario entre semana, precisó.
Por último, dijo que, en cuanto al apoyo para la rehabilitación de la linternilla de la cúpula y una habitación del templo de Pardo, dañados por un rayo el mes anterior, todavía no se tiene un monto para apoyar, ya que el proyecto técnico para la reparación está en proceso de aprobación.
Obra emblemática y de atracción turística
La basílica colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato es una de las estructuras más emblemáticas de la Ciudad de Guanajuato. Está ubicada en la plaza de la Paz, otrora llamada Plaza Mayor. Tiene la distinción de basílica desde 1957 y fue construida entre 1671 y 1696.
Este recinto religioso presenció innumerables sucesos; entre ellos el bautizo de Albino García, guerrillero insurgente durante la guerra de Independencia de México y los restos de Celedonio de Jarauta y Faustina Mártir, ambos concedidos por Antonio de Obregón y Alcocer, conde de La Valenciana.
La basílica colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato tiene un estilo barroco y neoclásico al exterior, presenta una portada principal constituida por tres organismos; mientras que en su parte interna en forma de cruz latina posee una nave, una cúpula, un crucero, dos campanarios y un altar dorado con la imagen de la virgen de Nuestra Señora de Guanajuato.
Su construcción y decoración fue auspiciada por los mineros guanajuatenses. Además de la patrona de la ciudad, la iglesia tiene también imágenes del Sagrado Corazón de Jesús, de san Ignacio de Loyola y, en la parte superior del altar central, la estatua de Santa Fe de Guanajuato. Su nombre y escultura remiten tanto a la estatua de Santa Fe de Granada, lugar de origen de la imagen, como al título fundacional de la urbeː noble y leal ciudad de Real de Minas de Santa Fe de Guanajuato.
En su interior sobresalen un órgano tubular, de 1098 tubos, su brillante tapiz y en el exterior sus grandes torres neoclásicas.
