Guanajuato, Gto.- Decenas, quizá centenares, de automovilistas que llegaron la tarde-noche de viernes y sábado a la ciudad de Guanajuato tuvieron dos opciones: tardar más de una hora para llegar al centro de la ciudad y encontrar un lugar alejado de la Festival de la Mujer para estacionarse o buscar otro destino. La ciudad colapsó entre cinco de la tarde y ocho de la noche.
La presidencia municipal habilitó nuevamente el terraplén del acceso Diego Rivera como estacionamiento gratuito y anunció que habría “cada rato” corridas de autobuses hacia el centro de la ciudad con un cobro de pasaje de 15 pesos por persona.
Ni salieron “a cada rato” y estaban atiborrados.
Con motivo del Festival de Día de Muertos, la ciudad tuvo una aglomeración similar a los mejores años de asistencia al Festival Internacional Cervantino.
Las estimaciones oficiales hablan de más de 20 mil personas que presenciaron el desfile de Catrinas, danzantes huamares, plañideras y otros personajes por el Tapete de la Muerte, en lo que se denominó “De regreso al Mictlán”.
Una parte de la calle Subterránea se convirtió en mercado de comida y artesanías en lo que denominaron “Túnel de la Muerte”.
La diferencia de los tiempos de Cervantino es que ahora el número de asistentes en automóvil es muy superior. Fue factor de colapso de la ciudad.
Hoy concluye la festividad. Es tarea para la presidenta municipal, Samantha Smith.