Dijo Dios: <<Hagamos al hombre a imagen y semejanza.
Que tenga autoridad sobre los peces del mar y sobre las aves del cielo,
Sobre los animales del campo, las fieras salvajes y los reptiles que se arrastran por el suelo. >>
Génesis 1, 27
El Hombre, para muchos es la creación perfecta, para otros, lo peor que le pudo pasar a la creación; bajo esta premisa Darren Aronofsky nos presenta una cinta profunda y llena de contrastes en la que nos cuenta todo lo que padeció el descendiente de Adán, Noé y su familia al llevar a cabo el mandato divino de preservar la creación de Dios incluyendo y a pesar de su propia existencia.
Protagonizada por Russell Crowe, Anthony Hopkins, Jennifer Connelly, Douglas Booth, Logan Lerman, Emma Watson y Ray Winstone, Noé es una de esas cintas que en sus cortos muestran una cosa y en la pantalla resultan otra, personalmente esperaba una película épica de gran calidad en realización y con un mensaje religioso, respondiendo al hecho de haberse estrenado en tiempo de cuaresma; para mí fortuna en lo que fue una grata sorpresa no fue así, esta sorpresa no radica en la realización del largometraje, el cual en realidad me pareció bastante tieso y lleno de descuidos, lo que llamó mi atención fue el planteamiento y manejo de los personajes, lo interesante, lo cautivador es que cada personaje carga con su propia existencia y todos comparten la misma fuerza, eso me pareció un gran logro; Noé es el protagonista, pero cada uno de los personajes son el héroe de su propia historia, porque en esta no hay buenos ni malos.
Todo esto nos lleva a estar frente a una cinta compleja y profunda, que requiere de cierto contexto y por supuesto una vasta verosimilitud para adentrarse a una historia que ocupa nos desliguemos de creencias científicas o religiosas para disfrutarla sin prejuicios. Fue notoria que a la vez combina de manera muy interesante la teoría de la evolución con la teoría creacionista de la Biblia, resultando en una buena y obscura interpretación del Génesis.
Mi reflexión sobre esta cinta es que todo esto, la historia, el tema, los personajes etc., son un pretexto para contarnos una vez más la historia del hombre, de la conciencia de su propia existencia, de su lugar en la creación y de los alcances de su voluntad, el Hombre frente al espejo.
Noé, para esta espectadora, es una grata sorpresa que bien vale la pena disfrutar, aunque esta cinta ha sufrido de malos comentarios, en mi caso la recomiendo ampliamente.