Abasolo, Guanajuato.- Virginia Espinoza, de 60 años, originaria de Abasolo, tiene 40 años de comerciante y contó un poco de lo que este gran trabajo le ha dejado al paso de los años.
Todo comenzó cuando doña Virginia, veía como su padre inicio en el mundo del comercio, vendiendo todos los artículos de temporada navideña, ella a su corta edad empezó a ayudarle a su padre sin saber que eso sería a lo que se dedicaría el resto de su vida.
“Cuando me case, no deje de vender y continúe con el legado de mi padre y ahora siguen mis hijas y es algo que me llena el corazón”, señaló.
Aparte de comprar mercancía para la venta decembrina, doña Virginia también hace manualidades, como las casitas y figuritas para la venta, “me da mucha satisfacción y gusto el fabricar mi propia mercancía”, dijo.
La abasolense comienza a prepararse todos los años para la venta navideña desde el mes de julio, pintando el papel, embolsando “la nieve”, haciendo sus casitas y figuritas.
“Me gusta mucho mi trabajo, todo lo hago con amor, lo disfruto, le doy gracias a Dios, por tanto, he superado muchas cosas y el comercio me ha dejado demás”, explicó.
Doña Virginia, finalizó diciendo lo orgullosa que se siente de haberles heredado a sus 9 hijos el valor del comercio, externó que está satisfecha de enseñarles los valores y el trabajo a través de la venta de temporada que tanto les ha dado.
