Ciudad de México
El líder del PRI, Enrique Ochoa, salió al paso de las críticas al anunciado ajuste a los precios de las gasolinas afirmando que mantener los precios “artificiales” en 2017 tendría un costo para las finanzas públicas de más de 200 mil millones de pesos (9.671 millones de dólares).
Ochoa, presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), aseveró que los nuevos precios de las gasolinas se deben al incremento del costo del petróleo en el mundo y al alza del valor del dólar. “Los precios del petróleo subieron de enero a la fecha un 67 por ciento”, expuso.
Mediante un boletín del PRI, el dirigente refirió que de 2006 a 2014 se mantuvieron precios artificiales de las gasolinas, lo que significó un costo de 1,1 billones de pesos (53.191 millones de dólares) que pudieron haber sido usados en beneficio de los mexicanos a través de más gasto social o nueva infraestructura.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó el martes que los precios máximos de las gasolinas subirán en el país entre 14 % y 20 % en enero de 2017, un alza anticipada hace unos días por la empresa estatal Pemex y que llega antes de la liberalización de los precios del sector, que comenzará en marzo.
La institución explicó que el incremento responde al aumento en los precios internacionales de los combustibles y no implica ninguna modificación o creación de impuestos.
De inmediato los líderes de los principales partidos de oposición criticaron duramente el ajuste y alertaron sobre efectos negativos sobre la ciudadanía e inestabilidad social.
El presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, también del PRD, invitó a través de la red Twitter a los ciudadanos a paralizar los primeros tres días de enero próximo la compra de gasolina.
Llamó a realizar “una Revolución Pacífica sin disparar un solo tiro ante un Gobierno mentiroso y traidor”.
Por su parte, el presidente del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, urgió al Gobierno federal a revisar la fórmula para determinar el precio de las gasolinas, así como a aplicar otras medidas que eviten que los aumentos se traduzcan en inflación en otros productos.