Washington, Estados Unidos
Dennis Aabo Sorensen de 36 años, pudo experimentar el sentido del tacto en su mano, gracias a una prótesis biónica que le permite distinguir formas y texturas. Sorensen sufrió un accidente manipulando pirotecnia hace 9 años y perdió su brazo izquierdo.
Esta prótesis la desarrollaron en conjunto investigadores suizos, italianos y alemanes quienes pusieron a prueba el invento con Sorensen, en el hospital Gemelli de Roma, según información de la revista Science Translational Medicine. Las prótesis anteriores a esta no permiten la distinción de objetos por lo que el paciente terminaba rompiéndolos o aplastándolos. De aquí, que la mano biónica con sentido del tacto sea una importante aportación porque mejora la forma en la que el paciente se relaciona con los objetos.
Sin embargo, este invento todavía no se comercializa ya que se realizarán diversas pruebas en varios pacientes para determinar cómo se adaptan a la prótesis para hacer los ajustes necesarios. Según información de conexiontotal.com, la mano biónica tardará entre 5 y 15 años para comercializarse, se seguirá trabajando en la duración de la batería y el precio se espera que se reduzca cuando se comience a fabricar en serie. Asimismo, se trabajará en perfeccionar el movimiento de los dedos.