“Lo amenazan con denunciarlo por lavado de dinero”: intentan extorsionar a cueramarense
Un hombre de la tercera edad acude a las autoridades tras recibir amenazas contra él y su familia culpándolos de un delito
Por Daniela Olivares.
Cuerámaro, Guanajuato.- Un hombre de la tercera edad acudió a presentar una denuncia por extorsión telefónica al ayuntamiento de Cuerámaro. Le llegaron varias llamadas de personas que decían ser familiares, de una paquetería de Silao y hasta de los federales.
El cueramarense, a quien llamaremos Ramón, por su seguridad, contó que era la primera vez que le ocurría algo así. Desde un principio, la llamada de su ‘yerno’ le pareció extraña, era una voz de un hombre joven, “mi yerno ya está más macizo”, comentó. El extorsionador lo contactó con el pretexto de haber enviado un regalo para pedirle datos personales como su domicilio y su nombre completo, el de su esposa y sus hijos.
Más tarde, otro número de teléfono que se identificó como una paquetería de Silao le avisó que dentro de las maletas que supuestamente le mandó el yerno, habían encontrado paquetes de dólares que no estaban registrados en el país y que para liberar ese dinero Pedro debía reunir 100 mil pesos mexicanos o se consideraba lavado de dinero. Enseguida habló con el supuesto yerno y le dejó claro que no quería problemas y que regresara el dinero. “Y sí me dijo aquel, mi yerno: ahí guárdelo, agarre unos 100 mil pesos pa’ que se los gaste en lo que usted quiera, al cabo hay un millón”, pero Pedro siguió insistiendo.
Poco después, cuenta que recibió otra llamada, pero esta vez de los federales, argumentando que el efectivo ya no podía moverse de Silao y que estaban a punto de reportarlo al aduanal de la frontera, pero podía echarle la mano. Al no recibir la respuesta que esperaban, los estafadores lo amenazaron con meter a la cárcel también a su familia.
El ciudadano quiso reportar su caso, aunque como dijo él: “no hacen nada”. Hace unos 3 años extorsionaron a una de sus hijas con 7 mil pesos. Rubí entró en pánico cuando le dijeron que su hermana Isabel estaba secuestrada. Incluso la intimidaron, como cuenta pedro: “si tu mamá hace tortillas y tu papá tiene tabiquera en la presita, ¿Cómo no van a poder conseguir 100 mil pesos?”. Ella llevó el dinero que alcanzó a juntar hasta el Oxxo de Huanímaro. Después se dieron cuenta de que Isabel estaba en la preparatoria.
Pedro acudió en esa ocasión a hacer la denuncia al ministerio público, pero no le dieron ninguna respuesta. Simplemente le dijeron que se conformara con que sus hijas estaban bien y que no podían hacer nada si la cantidad era menor a 20 mil pesos. Aun así, él espera que su acusación pueda servir de algo contra este problema.