Guanajuato, Guanajuato.- Los muertos revivieron andando por las calles sin penumbra alguna, su día llegó de celebrar, cantar y bailar al son de la muerte, carcajadas se escuchan como un eco, gritos, lamentos, y el chiflido del viento se escuchaba, un silencio profundo invadió la ciudad, sombras se veían pasar, personas elegantes y su rostro pálido.
La noche de ayer la ciudad de Guanajuato fue invadida, sus calles, plazas fueron tomadas por los muertos, pequeñas brujitas, calaveritas, el catrín.
Cientos de pequeñuelos, jóvenes de todas las edades salieron ayer a las calles para pedir su calaverita, personajes históricos de leyendas culinarias, brujas, calaveras, catrín, catrina, diablitos, toda una tradición por festejar en el mes de noviembre.
MONSERRAT UVALLE / NOTUS
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