Manuel Doblado, Guanajuato.- Un Cristo y una Cruz, que se encuentran en el Cerrito de Manuel Doblado, han sido parte de la historia de muchos habitantes.
Según don Abel, la cruz fue traída y puesta en ese lugar por doña Sara, una señora la cual ya falleció lamentablemente, ahí tenía su lapida para ser sepultada, pero al final, no fue sepultada ahí, dijo el dobladense.
“Ella, trajo unas reliquias de un lugar santo para colocarlas en este sitio”, mencionó don Abel.
Cada 3 de mayo es la gran fiesta de la Santa Cruz del Cerrito de Manuel Doblado, una fiesta que reunía a todas las familias oriundas de Doblado y de otros municipios del estado; Mariachi, banda, comida y mucha fiesta eran traídas hasta el cerrito, para celebrar la gran fiesta patronal.
“Eran una celebración inmensa, mucha gente venía y se vivía a flor de piel la fiesta, ahora con esta pandemia, todo cambio, ya será el segundo año que no se festeja como antes”, dijo.
En la parte delantera de la Santa Cruz viene una leyenda, en la cual se explica un poco de la historia.
“Este Cristo fue traído de Belén, ciudad Santa donde nació el Niño Dios y en una de sus partes de la Cruz, tiene reliquias muy valiosas, tiene partículas pequeñas de tierra de Belén, aceite de la lámpara donde se alumbra día y noche el sepulcro de Cristo y agua del Rio Jordán”
“Una persona a su paso por este mundo quiso dejar una huella, pero ante la imposibilidad monetaria, otra persona de muy buena voluntad, aportó la suma necesaria para edificar esta milagrosa Santa Cruz del Cerrito”
6 de agosto de 1984
A un par de meses de la fiesta, los habitantes del municipio saben que este año volverá a ser atípico y celebraran desde casa por la pandemia de COVID-19.
