Irapuato, Guanajuato
Miguel Ángel Chico Herrera, senador por Guanajuato, senador por el PRI, ha caído y la diputada loca, Irma Leticia González, también. Los funcionarios públicos cambian de bando y pasa del PRI a Morena, un partido que habla de regeneración, pero de priistas que pudiera decirse de manera hipotética que si las cosas no son a su manera, entonces no son.
El priista que hasta hace unas semanas parecía un combatiente integro por los colores de un partido que defendió durante 40 años, acabó con ellos en cuestión de horas, pues tras una reunión con Andrés Manuel López Obrador, líder de MORENA, cambió de piel.
El ahora ex priista se le pudiera ver en los mítines de AMLO o posiblemente hasta como candidato a otro puesto como los que ha obtenido en las últimas 4 décadas en la que se la ha pasado viviendo de la política.
En el mismo caso se encuentra la diputada loca, Irma Leticia González, que de ser priista y no alcanzar un registro como diputada federal, apareció como candidata a la presidencia de Irapuato también por MORENA.
Ambos personajes conocidos por su ímpetu y forma arrancada de conducirse ante sus compañeros políticos y sociales, los ponían como serios aspirantes a formar propuestas reales y sinceras, pero ahora asemejan que lo único que les importaba era continuar en el poder, pese a lo que pase y con quien pase.