Cuerámaro, Guanajuato.- Aunque la vida ha ido pasando, una muñeca la hace recordar los tiempos de su niñez y su cara, sus expresiones je dan ese sentido de que jugar a las barbies es parte de un pasado en el tiempo presente.
María “n” una mujer que a su edad, sigue laborando entre los comerciantes de Cuerámaro; ella es cueramarense de campo que con el paso del tiempo se tuvo que dedicar al comercio, junto a su familia.
En uno de esos días de tianguis sale acomodar el negocio de la familia, viste sencilla, trae debajo de su falda un pantalón para cubrirse del frío, usa un delantal y también usa suéter, pues el clima no le ha favorecido.
Lo interesante de ella, es que le emociona poder vestir a las muñecas, ponerles sus vestidos, arreglarlas y recordar todos esos momentos que tuvo en su niñez, algunos buenos y otros mejores, porque a pesar de que no tenía los grandes juguetes hoy al menos los puede disfrutar.