Silao, Guanajuato.- Ana María Araujo Huerta de 60 años de edad, es la cuarta generación que ha llevado a flote el negocio familiar denominado “El Atoroncito”, una fonda que ha sido el lugar preferido de muchos silaoenses y visitantes que asisten al Mercado González Ortega.
“Esta fonda era de la abuela de mi abuelita, ya tenemos más de 70 años con el negocio, después siguió mi abuela, luego mi mamá, continue yo y ahora mis hijos”, dijo.
Entre lágrimas, Ana María señaló como de chiquita le ayudaba a su abuelita Candelaria y a su mamá Ignacia, cuando ella tenia 11 años asistía al mercado a ayudarles en distintas actividades.
“Lloro porque recuerdo a mi gente a mi familia, le doy gracias a Dios, por tanto, recuerdo como le ayudaba a mi abuelita y saliendo de la escuela me venía rápidamente a recoger las mesas, limpiar, atender, todo era muy bonito en ese tiempo”, relató.
Ana María señaló que gracias a este trabajo ha conocido a grandes amistades las cuales conserva con mucho cariño y aunque unas ya se “adelantaron”, ella los recuerda y guarda en su corazón.
El platillo estrella de la fonda “El Atoroncito”, es el caldo de res que ha sido el preferido de propios y extraños.
“Mis hijos aquí crecieron, aquí los crie y los eduqué, ellos me han apoyado mucho y a ambos les gusta, ahora ellos cocinan y disfrutan lo que con mucho amor mi bisabuela construyó”, explicó.
La comerciante silaoense concluyó agradeciendo a toda la gente que ha pasado por su fonda a consumir, “les agradezco a todos por su preferencia y por sus buenos comentarios, sin ustedes no seriamos nada”, finalizó.