Kirkuk, Iraq
Las fuerzas de seguridad iraquíes detuvieron a un adolescente que portaba un cinturón de explosivos antes de que lo activara en la ciudad de Kirkuk (norte), indicaron este lunes responsables de seguridad.
Este ataque frustrado ocurrió el domingo por la noche, al día siguiente de que un niño kamikaze perpetrara un atentado suicida en Turquía, dejando más de 50 muertos.
“Las fuerzas de policía lograron detener a un kamikaze que llevaba un cinturón de explosivos. Nacido en 2001”, dijo a la prensa el jefe de la policía de Kirkuk, Jattab Omar Aref.
El adolescente tenía planeado activar su cinturón de explosivos en un santuario chiita en esta ciudad ubicada a 240 km al norte de Bagdad, agregó.
En las últimas horas, se señalaron tres incidentes similares en Kirkuk. En uno de ellos, un policía abatió a un kamikaze que intentó entrar en una sala de oración.
“Las fuerzas de policía lograron frustrar una operación terrorista que podría haber causado víctimas y provocar una catástrofe en la provincia”, dijo a el gobernador de Kirkuk, Najmeddin Karim.
Iraq está en guerra contra los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), que conquistó en 2014 grandes partes de su territorio.
El grupo extremista sunita suele utilizar a niños soldados para llevar a cabo atentados.
Según el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, el autor del atentado suicida que dejó el sábado al menos 54 muertos durante una boda en la ciudad de Gaziantep (sureste), tenía entre 12 y 14 años, y probablemente actuó siguiendo órdenes del EI.